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Los Beneficios del Masaje Perineal para las Embarazadas

Publicado: 8 mayo, 2022
Actualizado: 8 mayo, 2025

Querida futura mamá, si estás leyendo este artículo es porque te preocupas por preparar tu cuerpo para el hermoso momento del parto.

El embarazo es un viaje lleno de descubrimientos y preparativos, y uno de los aspectos menos comentados pero increíblemente útiles es el masaje perineal. Esta práctica sencilla puede marcar una gran diferencia en tu experiencia de parto, ayudándote a reducir el riesgo de desgarros y a tener una recuperación más cómoda después de dar a luz.

En este artículo, te acompañaré paso a paso para conocer todos los beneficios que el masaje perineal puede ofrecerte, así como la forma correcta de realizarlo. ¡Sigue leyendo para descubrir cómo esta técnica puede ser tu aliada en el embarazo!

En este artículo

¿Qué es el perineo y el masaje perineal?

Antes de hablar de los beneficios, es importante entender exactamente qué es el perineo y por qué necesita atención especial durante el embarazo.

El perineo es el área de piel y músculo ubicada entre la vagina y el ano en las mujeres. Esta zona tiene una función muy importante durante el parto, ya que debe estirarse considerablemente para permitir el paso del bebé. Sin la preparación adecuada, el perineo puede desgarrarse durante el parto, lo que puede causar dolor y complicaciones en la recuperación postparto.

El masaje perineal es una técnica que consiste en estirar y masajear suavemente los tejidos del perineo para aumentar su elasticidad. Se realiza introduciendo los dedos en la vagina y aplicando una presión suave hacia abajo y hacia los lados. Esta práctica ayuda a que el tejido se acostumbre a estirarse, preparándolo para el momento del parto.

El objetivo principal de este masaje es aumentar la flexibilidad y elasticidad de esta zona, permitiendo que se estire más fácilmente durante el parto y reduciendo la probabilidad de desgarros o la necesidad de una episiotomía (un corte quirúrgico realizado para agrandar la apertura vaginal durante el parto).

Beneficios del masaje perineal durante el embarazo

El masaje perineal ofrece numerosos beneficios para las mamás que se preparan para el parto. Estos beneficios están respaldados por estudios científicos y por la experiencia de muchas mujeres que han incorporado esta práctica durante su embarazo.

Reduce el riesgo de desgarros perineales

Uno de los principales beneficios del masaje perineal es la reducción significativa del riesgo de sufrir desgarros durante el parto. Los estudios muestran que las mujeres que practican el masaje perineal regularmente durante las últimas semanas del embarazo tienen hasta un 32% menos de probabilidades de sufrir traumatismos perineales que requieran puntos.

Disminuye la necesidad de episiotomía

La episiotomía es un procedimiento que, aunque a veces necesario, muchas mujeres prefieren evitar. El masaje perineal regular puede reducir significativamente la necesidad de realizar este corte quirúrgico, permitiendo que el parto progrese de forma más natural.

Aumenta la elasticidad del tejido perineal

Con la práctica regular, el tejido perineal se vuelve más elástico y flexible, lo que facilita la dilatación durante el parto y permite que el bebé pase con mayor facilidad y menos traumatismo para la madre.

Reduce el dolor postparto

Las mujeres que realizan masaje perineal reportan menos dolor en el área perineal después del parto. Esto se debe a que, al haber menos traumatismo durante el parto, la recuperación suele ser más rápida y menos dolorosa.

Aumenta la confianza y reduce la ansiedad

Conocer tu cuerpo y prepararlo activamente para el parto puede aumentar significativamente tu confianza y reducir la ansiedad relacionada con el parto. El masaje perineal te permite familiarizarte con la sensación de presión y estiramiento en esta área, lo que puede ayudarte a estar más preparada mental y físicamente para el momento del parto.

Promueve la circulación sanguínea

El masaje aumenta el flujo sanguíneo en la zona perineal, lo que mejora la oxigenación de los tejidos y promueve una mejor cicatrización en caso de que ocurra algún desgarro durante el parto.

Facilita la recuperación postparto

Un perineo más elástico y menos traumatizado durante el parto se recupera más rápidamente después del nacimiento, lo que te permitirá concentrarte más en disfrutar de tu bebé y menos en las molestias físicas.

¿Cuándo comenzar con el masaje perineal?

El momento ideal para comenzar con el masaje perineal es a partir de la semana 34 de embarazo. En este punto, ya estás en el tercer trimestre y tu cuerpo se está preparando naturalmente para el parto, pero aún tienes suficiente tiempo para que el masaje tenga un efecto beneficioso en la elasticidad de tus tejidos.

Comenzar demasiado pronto (antes de la semana 34) no proporciona beneficios adicionales y podría resultar incómodo debido a la presión del útero creciente. Por otro lado, comenzar después de la semana 38 puede ser útil, pero tendrás menos tiempo para que los tejidos se acostumbren al estiramiento.

Es importante destacar que nunca es demasiado tarde para empezar. Incluso si estás en las últimas semanas de embarazo, realizar el masaje perineal puede proporcionar beneficios. Lo ideal es practicarlo durante al menos 3-4 semanas antes del parto para obtener los mejores resultados.

Si tienes alguna condición médica específica, como placenta previa, sangrado vaginal, infección vaginal activa o ruptura prematura de membranas, debes consultar con tu médico antes de comenzar con el masaje perineal.

Preparación para realizar el masaje perineal

Antes de comenzar con el masaje perineal, es importante seguir algunos pasos de preparación para garantizar que sea efectivo y cómodo:

Higiene

Lava bien tus manos con agua y jabón para evitar introducir bacterias en la vagina. También puedes recortar tus uñas para evitar rasguños accidentales.

Momento adecuado

Elige un momento en el que estés relajada y tengas privacidad. Muchas mujeres encuentran que después de un baño o ducha caliente es ideal, ya que el calor ayuda a relajar los músculos y aumenta la circulación en el área.

Posición cómoda

Puedes realizar el masaje en varias posiciones: sentada con las piernas abiertas y apoyada en almohadas, semi-reclinada, o con una pierna elevada (por ejemplo, apoyada en el borde de la bañera). Experimenta para encontrar la posición que te resulte más cómoda.

Usa un espejo (opcional)

Especialmente las primeras veces, puede ser útil usar un espejo para visualizar el área perineal y asegurarte de que estás masajeando la zona correcta.

Lubricante

Utiliza un lubricante específico para el masaje perineal o aceites naturales como el de oliva, almendras dulces o aceite de coco. Estos ayudan a que el dedo se deslice suavemente y evitan la irritación. Evita los lubricantes con perfumes o aditivos que puedan irritar la delicada piel de esta zona.

Vacía tu vejiga

Asegúrate de ir al baño antes de comenzar el masaje para mayor comodidad.

Relájate

Toma unos minutos para respirar profundamente y relajarte. El masaje será más efectivo si tus músculos no están tensos.

Técnica paso a paso del masaje perineal

Ahora que estás preparada, te guiaré paso a paso para realizar correctamente el masaje perineal:

Paso 1: Aplica lubricante

Coloca una cantidad generosa de lubricante o aceite en tus dedos pulgares y en la entrada de la vagina. El lubricante es esencial para que el masaje sea cómodo y efectivo.

Paso 2: Posición de los dedos

Inserta tus pulgares en la vagina aproximadamente 3-4 centímetros (alrededor de la primera articulación del dedo). Alternativamente, puedes usar los dedos índice y medio si te resulta más cómodo, especialmente cuando tu vientre sea más prominente y te dificulte alcanzar la zona.

Paso 3: Presión hacia abajo y hacia los lados

Presiona los dedos hacia abajo (hacia el recto) y hacia los lados de la vagina. Deberías sentir un estiramiento, como una sensación de ardor o picazón leve.

Paso 4: Mantén la presión

Mantén esta presión durante alrededor de 2 minutos, o hasta que sientas un leve hormigueo o ardor. Esta sensación indica que la sangre está fluyendo a los tejidos, lo cual es exactamente lo que buscamos.

Paso 5: Masaje en forma de U

Mueve los dedos en un movimiento de U, estirando los tejidos vaginales hacia afuera, primero hacia un lado y luego hacia el otro. Imagina que estás dibujando una U en la parte inferior de tu vagina.

Paso 6: Estiramiento del tejido

Con los dedos aún dentro de la vagina, ejerce presión contra la pared posterior de la vagina (hacia el recto) y estira suavemente el tejido. Luego, ejerce presión contra las paredes laterales.

Paso 7: Repetición

Repite este proceso durante aproximadamente 5 minutos en total.

Es normal sentir una sensación de ardor o estiramiento durante el masaje. Sin embargo, no debería ser doloroso. Si sientes dolor, reduce la presión o consulta con tu médico.

Si te resulta difícil realizar el masaje tú misma, puedes pedirle a tu pareja que te ayude. En ese caso, será importante que le expliques exactamente cómo quieres que se realice el masaje y que mantenga una comunicación abierta contigo durante el proceso.

Frecuencia recomendada

Para obtener los mejores resultados, los expertos recomiendan realizar el masaje perineal con la siguiente frecuencia:

  • Idealmente, practica el masaje perineal entre 3 y 4 veces por semana.
  • Cada sesión debe durar aproximadamente 5 minutos.
  • Mantén esta rutina desde la semana 34 hasta el parto.

Ser constante es clave para obtener los beneficios del masaje perineal. Los estudios muestran que las mujeres que realizan el masaje con regularidad durante al menos 3-4 semanas obtienen mejores resultados que aquellas que lo hacen de forma esporádica.

Si en algún momento sientes molestias significativas o notas cualquier signo inusual como sangrado, dolor intenso o secreción con mal olor, suspende el masaje y consulta inmediatamente con tu médico.

Recuerda que se trata de un proceso gradual. Con el tiempo, notarás que el tejido se vuelve más elástico y que puedes realizar el masaje con mayor facilidad.

Posibles molestias y cómo manejarlas

Aunque el masaje perineal es generalmente seguro y beneficioso, algunas mujeres pueden experimentar ciertas molestias durante o después de realizarlo. Aquí te explico las más comunes y cómo manejarlas:

Sensación de ardor o quemazón

Es normal sentir una leve sensación de ardor durante el masaje, especialmente las primeras veces. Esta sensación indica que se está produciendo un estiramiento efectivo del tejido.

Solución: Usa más lubricante y reduce ligeramente la presión. Con el tiempo, esta sensación debería disminuir a medida que el tejido se vuelve más elástico.

Ligero sangrado o manchado

En ocasiones, puede producirse un ligero manchado después del masaje, especialmente si has aplicado demasiada presión.

Solución: Reduce la presión en las próximas sesiones y asegúrate de que tus uñas estén bien recortadas. Si el sangrado es más que un simple manchado o persiste, consulta con tu médico.

Incomodidad al alcanzar el área

A medida que el embarazo avanza, puede resultar más difícil alcanzar el área perineal debido al crecimiento del vientre.

Solución: Prueba diferentes posiciones, como sentarte en el inodoro con un espejo, o pide ayuda a tu pareja.

Inflamación o irritación

Algunas mujeres pueden experimentar irritación en la zona después del masaje.

Solución: Asegúrate de usar un lubricante adecuado sin perfumes ni aditivos. Si la irritación persiste, prueba con un aceite diferente o consulta con tu médico.

Contracciones de Braxton Hicks

En algunas mujeres, la estimulación del área perineal puede desencadenar contracciones de Braxton Hicks (contracciones de práctica).

Solución: Estas contracciones son generalmente inofensivas, pero si se vuelven regulares, intensas o dolorosas, detén el masaje y contacta a tu médico.

Recuerda que cualquier técnica nueva puede causar cierta incomodidad inicial, pero esto generalmente mejora con la práctica. Si experimentas dolor significativo, sangrado abundante, contracciones intensas o cualquier otro síntoma preocupante, detén el masaje y consulta inmediatamente con tu profesional de la salud.

Mitos y realidades sobre el masaje perineal

Existen varios mitos en torno al masaje perineal que pueden generar dudas o confusión. Vamos a aclarar algunos de los más comunes:

Mito 1: El masaje perineal garantiza que no habrá desgarros

Realidad: Aunque el masaje perineal reduce significativamente el riesgo de desgarros perineales, no puede garantizar completamente que no ocurrirán. Factores como el tamaño del bebé, la posición durante el parto y la rapidez del mismo también influyen en la probabilidad de sufrir desgarros.

Mito 2: Es doloroso y desagradable

Realidad: Si bien puede sentirse incómodo al principio, el masaje perineal no debería ser doloroso. Con la técnica adecuada, suficiente lubricante y práctica regular, la mayoría de las mujeres se acostumbran a la sensación e incluso la encuentran relajante.

Mito 3: Solo es útil para primíparas (mujeres que darán a luz por primera vez)

Realidad: Aunque los estudios muestran que las primíparas obtienen los mayores beneficios, las mujeres que ya han tenido hijos también pueden beneficiarse del masaje perineal, especialmente si han tenido desgarros o episiotomías en partos anteriores.

Mito 4: Puede inducir el parto prematuramente

Realidad: El masaje perineal realizado correctamente no induce el parto. A diferencia de la estimulación de los pezones o el sexo (que pueden liberar oxitocina y potencialmente desencadenar contracciones), el masaje perineal enfocado en el estiramiento del tejido no tiene este efecto.

Mito 5: No es necesario si planeas tener una cesárea

Realidad: Aunque es cierto que en una cesárea planificada no se producirá un parto vaginal, muchas cesáreas ocurren después de que el trabajo de parto ha comenzado. Además, los planes pueden cambiar, por lo que estar preparada para un parto vaginal siempre es beneficioso.

Mito 6: Cualquier aceite o crema sirve para el masaje

Realidad: Es importante usar lubricantes o aceites específicos que no irriten la delicada piel del área vaginal. Los aceites naturales como el de oliva, almendras o coco son buenas opciones, así como los lubricantes diseñados específicamente para el masaje perineal.

Evidencia científica

El masaje perineal no es solo una recomendación basada en tradiciones o creencias populares; está respaldado por investigaciones científicas sólidas y por las experiencias positivas de muchas mujeres que lo han practicado.

Varios estudios clínicos han demostrado los beneficios del masaje perineal:

  • Una revisión sistemática publicada en la Biblioteca Cochrane, que analizó datos de más de 2,000 mujeres, encontró que el masaje perineal prenatal reduce en aproximadamente un 9% el riesgo de trauma perineal que requiere sutura.
  • Otro estudio publicado en el American Journal of Obstetrics and Gynecology mostró que las mujeres que practicaban el masaje perineal tenían un 15% menos de probabilidades de necesitar una episiotomía.
  • La investigación también ha demostrado que las mujeres que realizaban masaje perineal reportaban menos dolor en el área tres meses después del parto.

Preguntas frecuentes

¿Puede el masaje perineal provocar infecciones?

Si se realiza con las manos limpias y se utilizan lubricantes adecuados, el riesgo de infección es mínimo. Sin embargo, si tienes una infección vaginal activa, es mejor esperar hasta que se resuelva antes de comenzar con el masaje perineal.

¿Es seguro realizar el masaje perineal si tengo hemorroides?

Si tienes hemorroides, debes ser especialmente cuidadosa durante el masaje para no irritar más el área. Consulta con tu médico antes de comenzar, ya que podría recomendarte modificaciones a la técnica o, en algunos casos, desaconsejar el masaje hasta que las hemorroides mejoren.

¿Es normal que duela al principio?

Es normal sentir una sensación de estiramiento o ardor leve, pero no debería ser doloroso. Si sientes dolor significativo, reduce la presión o consulta con tu médico.

¿Qué pasa si no puedo alcanzar mi perineo debido al tamaño de mi vientre?

Si te resulta difícil alcanzar tu perineo a medida que tu vientre crece, puedes pedirle ayuda a tu pareja o usar diferentes posiciones, como pararte con una pierna elevada o sentarte en el inodoro.

¿Puede el masaje perineal afectar a mi bebé?

No, el masaje perineal es completamente seguro para el bebé cuando se realiza correctamente. El bebé está protegido por el útero, el saco amniótico y el tapón mucoso del cuello uterino.

¿Debo continuar con el masaje si ya he tenido un parto vaginal anterior?

Sí, aunque los mayores beneficios se han observado en mujeres que darán a luz por primera vez, el masaje perineal también puede beneficiar a mujeres que ya han tenido partos vaginales, especialmente si experimentaron desgarros o episiotomías en partos anteriores.

¿Existe alguna contraindicación para realizar el masaje perineal?

El masaje perineal está contraindicado en casos de placenta previa, sangrado vaginal inexplicable, infecciones vaginales activas, amenaza de parto prematuro o ruptura prematura de membranas. Siempre consulta con tu médico antes de comenzar, especialmente si tienes alguna condición médica.

Conclusión

El masaje perineal es una técnica simple pero efectiva que puede marcar una gran diferencia en tu experiencia de parto. Al dedicar unos minutos varias veces por semana durante las últimas semanas de tu embarazo, puedes preparar tu cuerpo para el momento del parto, reduciendo significativamente el riesgo de desgarros y episiotomías.

Recuerda que la constancia es clave para obtener los mejores resultados. Si bien puede sentirse un poco incómodo al principio, muchas mujeres reportan que se acostumbran rápidamente y que los beneficios durante y después del parto son más que compensatorios.

Como con cualquier práctica relacionada con el embarazo, es importante consultar con tu médico o matrona antes de comenzar, especialmente si tienes alguna condición médica particular.

El cuidado prenatal va más allá de las visitas médicas regulares; incluye también cómo tú misma preparas tu cuerpo para el gran día. El masaje perineal es una herramienta poderosa que te permite participar activamente en esta preparación, aumentando tu confianza y potencialmente mejorando tu experiencia de parto y recuperación postparto.

¿Te animas a incorporar el masaje perineal a tu rutina prenatal? Tu cuerpo y tu futuro bebé te lo agradecerán.

Acerca Grupo Editor

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