Publicado: 26 febrero, 2023
Actualizado: 10 mayo, 2025
Si estás buscando una forma amable de reconectar con tu cuerpo y perder el peso ganado durante el embarazo, el yoga puede ser tu gran aliado en esta etapa.
Esta práctica milenaria no solo te ayudará a recuperar tu figura, sino que también te brindará momentos de calma y conexión contigo misma en medio de la intensa experiencia de la maternidad reciente.
En este artículo
Cambios corporales después del parto: Por qué es diferente perder peso en esta etapa

El posparto es un período único en la vida de una mujer, con transformaciones físicas y hormonales que requieren atención especial. Durante el embarazo, tu cuerpo experimentó cambios profundos para albergar a tu bebé, y ahora necesita tiempo y cuidados específicos para recuperarse.
Los cambios corporales posparto incluyen:
- Cambios hormonales: Las fluctuaciones de estrógeno y progesterona afectan directamente tu metabolismo y la forma en que tu cuerpo almacena o quema grasa.
- Diástasis abdominal: La separación de los músculos abdominales es común y requiere ejercicios específicos para su recuperación.
- Cambios en la distribución de grasa: El cuerpo tiende a almacenar grasa en áreas específicas como abdomen, caderas y muslos como reserva energética, especialmente si estás amamantando.
- Fatiga y falta de sueño: Factores que pueden afectar tu metabolismo y hacer más difícil la pérdida de peso.
- Retención de líquidos: Especialmente durante las primeras semanas después del parto.
Entender estos cambios te ayudará a tener expectativas realistas y a elegir las mejores estrategias para perder peso de forma saludable. El yoga, con su enfoque integral y respetuoso con el cuerpo, se adapta perfectamente a las necesidades específicas de esta etapa.
Beneficios del yoga postparto: Físicos y emocionales

El yoga ofrece beneficios extraordinarios para las mamás recientes, combinando el trabajo físico con el bienestar emocional tan necesario en esta etapa. Es mucho más que una herramienta para perder peso: es un sistema completo que nutre todas las dimensiones de tu ser.
Beneficios físicos:
- Fortalecimiento del core: Ayuda a recuperar la fuerza en los músculos abdominales y del suelo pélvico, áreas especialmente afectadas durante el embarazo y parto.
- Mejora la postura: Contrarrestando los efectos de cargar al bebé y amamantar durante horas.
- Aumenta el metabolismo: Las posturas activas ayudan a quemar calorías y activar el sistema digestivo.
- Tonifica músculos: Especialmente en áreas donde se acumula grasa posparto como abdomen, muslos y brazos.
- Mejora la flexibilidad: Recuperando gradualmente la movilidad articular.
- Alivia dolores comunes: Como molestias en espalda, cuello y hombros.
Beneficios emocionales:
- Reduce el estrés: A través de la respiración consciente y la meditación.
- Combate la depresión posparto: Gracias a la liberación de endorfinas durante la práctica.
- Mejora la calidad del sueño: Fundamental cuando los patrones de sueño están alterados.
- Fomenta la conexión mente-cuerpo: Ayudándote a aceptar y apreciar tu cuerpo en transformación.
- Crea un espacio personal: Te brinda momentos de autocuidado en medio de la intensa demanda de la maternidad.
El yoga te permite trabajar al ritmo de tu propio cuerpo, honrando su proceso de recuperación mientras gradualmente recuperas fuerza y vitalidad.
Cuándo comenzar con yoga después del parto: Consideraciones importantes
Iniciar la práctica de yoga en el momento adecuado es fundamental para tu recuperación. Cada mujer y cada parto son diferentes, por lo que debes escuchar a tu cuerpo y seguir las recomendaciones médicas.
Pautas generales según el tipo de parto:
- Parto vaginal sin complicaciones: Puedes comenzar con yoga suave aproximadamente a las 6 semanas, después de recibir el alta médica.
- Parto por cesárea: Se recomienda esperar entre 8 y 12 semanas, una vez que la cicatriz haya sanado completamente.
- Parto con complicaciones: Sigue las indicaciones específicas de tu médico, que podrían extender el tiempo de espera.
Señales de que tu cuerpo está listo:
- El sangrado posparto (loquios) ha cesado o es mínimo
- No sientes dolor al realizar movimientos básicos
- Te sientes con energía suficiente para hacer ejercicio suave
- Has recibido la aprobación de tu médico o matrona
Precauciones importantes:
- Comienza gradualmente: Inicia con sesiones cortas de 10-15 minutos e incrementa progresivamente.
- Evita posturas intensas: No realices flexiones abdominales fuertes, inversiones completas o torsiones profundas en las primeras semanas.
- Presta atención a señales de alarma: Detén la práctica si experimentas dolor, sangrado aumentado o fatiga extrema.
- Si estás amamantando: Practica preferiblemente después de dar el pecho para mayor comodidad.
- Hidratación: Mantente bien hidratada, especialmente si estás lactando.
Recuerda que no hay prisa. Tu cuerpo ha realizado un trabajo extraordinario y merece tiempo para recuperarse. El enfoque respetuoso del yoga te permitirá reconectar con tu cuerpo gradualmente.
Tipos de yoga recomendados para mamás recientes

No todos los estilos de yoga son igualmente beneficiosos para el período posparto. Algunos se adaptan mejor a las necesidades específicas de las mamás recientes, ofreciendo un equilibrio entre recuperación, fortalecimiento y bienestar.
Estilos de yoga ideales para el posparto:
- Yoga postparto específico: Clases diseñadas especialmente para mamás recientes, que consideran las necesidades particulares de recuperación.
- Yoga restaurativo: Enfocado en posturas pasivas sostenidas con apoyos, ideal para las primeras semanas cuando necesitas principalmente descanso y recuperación.
- Yoga suave o gentle yoga: Ofrece movimientos básicos y accesibles, perfecto para retomar la actividad física gradualmente.
- Hatha yoga: Con su enfoque equilibrado entre posturas, respiración y relajación, permite una práctica adaptable a diferentes niveles de energía.
- Yoga para mamá y bebé: Te permite practicar con tu pequeño, incorporándolo en algunas posturas o manteniéndolo cerca mientras realizas tu práctica.
Estilos a evitar inicialmente:
- Yoga hot o Bikram: El calor intenso puede aumentar la fatiga y la deshidratación, especialmente si estás amamantando.
- Ashtanga o vinyasa intenso: Las secuencias vigorosas y saltos pueden ser demasiado exigentes para el cuerpo en recuperación.
- Power yoga: Su enfoque en la fuerza y resistencia puede sobrecargar los músculos y articulaciones aún débiles.
Lo más recomendable es buscar clases específicas de yoga posparto, idealmente con instructores certificados en esta especialidad. Si no tienes acceso a estas clases, opta por estilos suaves y comunica siempre a tu instructor que eres una mamá reciente para que pueda ofrecerte modificaciones apropiadas.
8 posturas de yoga efectivas para perder peso postparto
Estas asanas o posturas han sido seleccionadas específicamente para ayudarte a tonificar áreas clave afectadas durante el embarazo, activar tu metabolismo y fortalecer gradualmente tu cuerpo. Recuerda siempre trabajar dentro de tus límites actuales y modificar según sea necesario.
Postura de la Montaña con elevación de brazos (Tadasana con Urdhva Hastasana)
Esta postura básica activa todo el cuerpo, mejora la postura y fortalece los músculos centrales.
- Párate con los pies juntos o separados al ancho de las caderas.
- Inhala y eleva los brazos hacia el techo, estirando toda la columna.
- Mantén abdominales suavemente activados y hombros relajados.
- Sostén por 5-8 respiraciones, concentrándote en la elongación.
Postura del Guerrero II (Virabhadrasana II)
Excelente para tonificar piernas, caderas y fortalecer el core.
- Separa las piernas ampliamente y gira el pie derecho hacia afuera.
- Dobla la rodilla derecha alineada sobre el tobillo.
- Extiende los brazos a los lados a la altura de los hombros.
- Mantén el torso erguido y la mirada sobre la mano delantera.
- Sostén por 30-60 segundos y cambia de lado.
Postura de la Silla (Utkatasana)
Potente para fortalecer muslos, glúteos y core, áreas que necesitan especial atención posparto.
- Párate con los pies juntos o ligeramente separados.
- Dobla las rodillas como si te sentaras en una silla invisible.
- Lleva el peso hacia los talones y extiende los brazos hacia arriba.
- Mantén la espalda recta y el abdomen suavemente activado.
- Sostén por 30-45 segundos, respirando profundamente.
Postura del Puente suave (Setu Bandhasana modificado)
Ideal para fortalecer glúteos y suelo pélvico, además de abrir el pecho.
- Recuéstate boca arriba con rodillas dobladas y pies en el suelo.
- Coloca los pies a la anchura de las caderas, cerca de los glúteos.
- Inhala y eleva caderas y espalda, manteniendo hombros en el suelo.
- Para versión más suave, no subas demasiado alto inicialmente.
- Sostén por 5-8 respiraciones y baja vertebra por vertebra.
Tabla modificada (Plank con rodillas)
Versión adaptada para fortalecer core y brazos gradualmente.
- Comienza en cuatro puntos de apoyo (manos y rodillas).
- Extiende las piernas hacia atrás, manteniendo las rodillas apoyadas.
- Alinea hombros sobre muñecas y crea una línea recta desde rodillas a cabeza.
- Activa suavemente el abdomen sin hundir la zona lumbar.
- Mantén por 20-30 segundos, incrementando gradualmente.
Postura del Barco modificada (Navasana adaptada)
Excelente para fortalecer abdominales respetando la recuperación.
- Siéntate con rodillas dobladas y pies en el suelo.
- Inclina el torso ligeramente hacia atrás manteniendo la espalda recta.
- Eleva los pies del suelo, manteniendo las rodillas dobladas.
- Extiende los brazos hacia adelante o sosteniendo detrás de los muslos.
- Mantén por 3-5 respiraciones y descansa. Repite 3 veces.
Torsión suave sentada (Ardha Matsyendrasana modificada)
Ayuda a estimular la digestión y tonificar la cintura.
- Siéntate con las piernas extendidas.
- Dobla la rodilla derecha y cruza el pie sobre la pierna izquierda.
- Coloca el brazo izquierdo por fuera de la rodilla derecha.
- Gira suavemente el torso hacia la derecha, apoyando la mano derecha detrás.
- Mantén la columna alargada y gira solo hasta donde sea cómodo.
- Sostén por 5-8 respiraciones y cambia de lado.
Postura del Niño (Balasana)
Perfecta para descansar entre posturas y relajar la espalda.
- Arrodíllate y siéntate sobre los talones.
- Lleva el torso hacia adelante hasta apoyar la frente en el suelo.
- Extiende los brazos hacia adelante o a los lados del cuerpo.
- Respira profundamente, relajando espalda y hombros.
- Mantén por 8-10 respiraciones o el tiempo que necesites.
Practica estas posturas como una secuencia, realizando cada una por el tiempo sugerido y descansando según sea necesario. A medida que ganes fuerza, puedes aumentar gradualmente los tiempos de permanencia y la intensidad.
Cómo crear una rutina de yoga en casa para mamás ocupadas
Sabemos que con un bebé, cada minuto cuenta. Por eso, te ofrecemos estrategias prácticas para incorporar el yoga a tu vida diaria, adaptándolo a los ritmos impredecibles de la maternidad reciente.
Elementos clave para una rutina exitosa:
- Consistencia sobre duración: Es mejor practicar 10-15 minutos diarios que una hora una vez por semana.
- Flexibilidad: Adapta tu práctica al horario de tu bebé, no te frustres si necesitas interrumpirla.
- Espacio dedicado: Acondiciona un pequeño rincón con lo necesario para tu práctica.
- Material básico: Una buena esterilla antideslizante, un par de bloques y una manta o cojín.
- Recursos digitales: Apps o videos específicos de yoga posparto que puedas seguir fácilmente.
Rutinas según el tiempo disponible:
Micro-rutina (5-10 minutos):
- 5 respiraciones profundas conscientes
- 5 saludos al sol modificados (versión suave)
- Postura del niño para cerrar
- Perfecta para cuando el bebé está tomando una siesta corta
Rutina corta (15-20 minutos):
- 3 minutos de respiración centrada
- 5 minutos de calentamiento suave
- 10 minutos alternando 4 posturas básicas (mantén cada una por 5-8 respiraciones)
- 2 minutos de relajación final
- Ideal para aprovechar mientras el bebé está entretenido
Rutina completa (30-45 minutos):
- 5 minutos de meditación y establecimiento de intención
- 10 minutos de calentamiento progresivo
- 20 minutos secuenciando las 8 posturas recomendadas
- 10 minutos de relajación profunda (Savasana)
- Perfecta para cuando tienes ayuda con el bebé
Consejos para mantener la constancia:
- Haz de la mañana tu aliada: Practica antes de que el bebé despierte o durante su primera siesta.
- Incorpora a tu bebé: Para posturas sencillas, colócalo frente a ti para que te observe.
- Fracciona la práctica: Si es necesario, divide tu rutina en 2-3 sesiones cortas durante el día.
- Utiliza recordatorios visuales: Un calendario o app para marcar tus días de práctica.
- Sé amable contigo misma: Algunos días solo podrás hacer 5 minutos y está perfectamente bien.
Recuerda que en esta etapa, cualquier momento que dediques a tu bienestar es valioso. Con el tiempo, estos momentos se irán extendiendo naturalmente a medida que tu bebé crezca y tu rutina se estabilice.
Yoga y alimentación: Complementando tu práctica para mejores resultados

El yoga trabaja transformando tu cuerpo y mente, pero para optimizar la pérdida de peso, es fundamental complementar tu práctica con una alimentación consciente. Esto no significa hacer dietas restrictivas, especialmente si estás amamantando, sino adoptar hábitos alimenticios que nutran y apoyen tu recuperación.
Principios de alimentación consciente posparto:
- Hidratación prioritaria: Bebe al menos 2-3 litros de agua diarios, fundamental si estás lactando.
- Comidas pequeñas y frecuentes: Distribuye tu alimentación en 5-6 comidas pequeñas para mantener energía estable.
- Alimentos integrales: Prioriza granos enteros, verduras, frutas y proteínas de calidad.
- Grasas saludables: Incluye aguacate, aceite de oliva, frutos secos y semillas.
- Proteínas completas: Fundamentales para la recuperación muscular y producción de leche.
- Cocina con especias: Cúrcuma, jengibre y canela tienen propiedades antiinflamatorias y metabólicas.
Alimentos que favorecen la recuperación y pérdida de peso:
- Alimentos ricos en hierro: Como lentejas, espinacas y carnes magras, para recuperarte de la pérdida sanguínea.
- Calcio: Fundamental para tus huesos y producción de leche (yogur, almendras, verduras de hoja verde).
- Omega-3: Para reducir inflamación y favorecer la salud mental (pescados grasos, chía, nueces).
- Fibra: Para mejorar digestión y promover saciedad (avena, manzanas, semillas de lino).
- Alimentos probióticos: Como yogur natural y kéfir, para mejorar la digestión y sistema inmune.
Hábitos alimenticios que complementan el yoga:
- Atención plena al comer: Practica la misma consciencia que aplicas en yoga a tus comidas.
- Comer según tu dosha: Si conoces principios de ayurveda, adapta tu alimentación a tu constitución.
- Respetar el hambre real: Distingue entre hambre emocional (común en posparto) y física.
- Evitar comer tarde: Termina tu última comida al menos 2-3 horas antes de dormir.
- Iniciar el día con agua tibia con limón: Ayuda a despertar el metabolismo suavemente.
Alimentos a limitar (no eliminar completamente):
- Azúcares refinados: Pueden causar picos de energía seguidos de fatiga.
- Cafeína en exceso: Especialmente si estás amamantando o tienes problemas para dormir.
- Alimentos ultraprocesados: Suelen ser altos en sodio, grasas no saludables y aditivos.
- Alcohol: Interfiere con la calidad del sueño y puede afectar la producción de leche.
Recuerda que este no es momento para dietas restrictivas. Tu cuerpo necesita nutrición abundante para recuperarse y, si estás amamantando, producir leche nutritiva para tu bebé. El enfoque debe ser en alimentación nutritiva y consciente, no en restricción calórica severa.
Preguntas frecuentes sobre yoga postparto y pérdida de peso
Respondemos a las dudas más comunes que surgen cuando se considera el yoga como herramienta para perder peso después del parto.
¿Puedo practicar yoga si estoy amamantando?
Absolutamente sí. El yoga es una de las actividades más compatibles con la lactancia. Se recomienda practicar después de amamantar para mayor comodidad.
La respiración profunda y la reducción del estrés que proporciona el yoga pueden incluso mejorar la producción de leche. Solo asegúrate de mantenerte bien hidratada antes, durante y después de la práctica.
¿Cuánto tiempo tomará ver resultados en la pérdida de peso?
Cada mujer es diferente, pero en general, con una práctica consistente de 3-4 veces por semana combinada con alimentación consciente, puedes empezar a notar cambios en 4-6 semanas. La pérdida de peso saludable es gradual, aproximadamente 0.5-1 kg por semana.
Recuerda que los primeros cambios suelen notarse en cómo te sientes (más energía, mejor postura) antes de verse reflejados en la báscula.
¿El yoga realmente quema suficientes calorías para perder peso?
Dependiendo del estilo, una sesión de yoga puede quemar entre 150-400 calorías por hora. Sin embargo, el beneficio del yoga para la pérdida de peso va más allá de las calorías quemadas durante la práctica.
El yoga aumenta tu metabolismo, mejora la calidad del sueño, reduce el estrés (que puede causar retención de peso) y promueve hábitos más conscientes, incluyendo una mejor relación con la comida.
¿Puedo practicar si tengo diástasis abdominal?
Sí, pero con modificaciones adecuadas. El yoga puede ser beneficioso para recuperarte de la diástasis, siempre que evites posturas que aumenten la presión intraabdominal (como planchas tradicionales o flexiones abdominales).
Busca instructores familiarizados con esta condición o programas específicos para diástasis. Es recomendable consultar con un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico antes de comenzar.
¿Es seguro practicar yoga si tuve cesárea?
Sí, pero debes esperar más tiempo (generalmente 8-12 semanas) y comenzar con posturas muy suaves. Evita inicialmente flexiones abdominales, torsiones profundas y posturas boca abajo. Siempre consulta con tu médico antes de comenzar.
Con el enfoque adecuado, el yoga puede ser excelente para la recuperación de la cesárea, fortaleciendo gradualmente el abdomen y mejorando la circulación en el área de la cicatriz.
¿Qué hago si no tengo tiempo para una práctica completa?
La belleza del yoga es que puede adaptarse a cualquier espacio de tiempo. Incluso 5-10 minutos diarios son beneficiosos. Puedes dividir tu práctica en mini-sesiones a lo largo del día o enfocarte en 2-3 posturas específicas cuando tengas un momento.
La consistencia es más importante que la duración. Muchas mamás practican durante la siesta del bebé o incluso incorporan a sus pequeños en algunas posturas.
¿El yoga puede ayudarme con problemas específicos como dolor de espalda posparto?
Definitivamente. El yoga es especialmente efectivo para aliviar dolores comunes posparto como molestias en la espalda baja, tensión en hombros y cuello (por cargar y amamantar) y discomfort en caderas.
Las posturas de estiramiento y fortalecimiento, combinadas con la atención a la alineación postural, pueden reducir significativamente estos problemas. Para dolores específicos, considera consultar con un instructor de yoga que tenga experiencia en posparto.
Conclusión y palabras de aliento
El camino hacia la recuperación después del parto es tan único como tú y tu bebé. El yoga ofrece una senda amorosa para reconectar con tu cuerpo, fortalecer lo que se ha debilitado y honrar la increíble transformación que has experimentado.
Más allá de la pérdida de peso, que llegará naturalmente con la práctica constante, el yoga te regala momentos de paz y conexión contigo misma en medio de la hermosa intensidad de la maternidad.
Recuerda que tu cuerpo ha realizado un milagro. Merece paciencia, gratitud y cuidados. No se trata de «volver» a como eras antes, sino de descubrir la nueva mujer en la que te has convertido, integrando la experiencia de la maternidad en cada célula de tu ser.
Cada postura, cada respiración consciente, cada momento dedicado a tu práctica es un acto de amor propio que se derrama hacia tu familia. Cuando cuidas de ti, cuidas mejor de quienes amas. El yoga te invita a encontrar equilibrio en este nuevo capítulo de tu vida, permitiéndote ser una madre presente y energizada.
Comienza donde estás, con lo que tienes, por el tiempo que puedas. Celebra cada pequeño progreso sin compararte con nadie más. Tu viaje es único y valioso en cada una de sus etapas.
Namaste, mamá guerrera. Tu fuerza y belleza brillan más que nunca.
Tu Maternidad Maternidad, Embarazo, Parto, Lactancia y Crianza
